El Buen Inquilino nace para aportar valor y mejorar la relación de inquilino propietario. El objetivo principal es reducir la probabilidad de impagos y agregar un plus de confianza, poniendo al inquilino en el centro.
EBI ofrece a los inquilinos una plataforma en la que poder aportar toda la información necesaria para convencer a los propietarios de que son los idóneos para su inmueble. El inquilino podrá acceder a distintas comodidades, como la llave mágica, por la que se le adelantarán la fianza y hasta los 12 primeros meses del alquiler, además de un seguro.
Los inquilinos recibirán ofertas de propietarios o podrán presentar su candidatura a un inmueble. Además se les provee de un espacio digital seguro donde guardar sus documentos para agilizar el proceso del alquiler.
Para el propietario es importante alquilar seguro para ello EBI le ayudará a elegir la mejor candidatura posible.
Los propietarios tendrán información sobre el perfil de todos los candidatos para analizar su información de contacto, preferencias o incluso recomendaciones de otros propietarios.
EBI también permite solicitar un informe detallado de la candidatura, con información extra para valorar y decidir cual es el mejor candidato.
Como se ha mencionado antes, EBI nace para aportar valor y mejorar la relación entre propietario e inquilino, por lo que confianza, seriedad, profesionalidad y amabilidad eran conceptos imprescindibles que debían plasmarse en la imagen. En el isotipo, la «E» transformada en tres líneas paralelas, transmitiendo la profesionalidad y seriedad necesaria en el proceso del alquiler, la «B» como punto de unión entre los distintos agentes, simbolizando la unión en las relaciones, además de transmitir amabilidad y confianza con las curvas. y por último la «I» como una línea recta, aportando imparcialidad a las relaciones.
La paleta de colores se mueve en tonos azules azul oscuro que otorga confianza y seriedad; y otro color azul más vivo y eléctrico que es el protagonista en la mayor parte de la aplicación y que se usa como CTA.
Además incorporamos una gama de grises que utilizamos para diferenciar secciones o elementos desactivados fundamentalmente.
Por último hemos incorporado un color terciario de tono verde que utilizamos en algunas composiciones gráficas para barras de progreso o para dar feedback al usuario.
También utilizamos en ocasiones el amarillo y el rojo para mensajes de alerta o error.
Hemos optado por botones con esquinas redondeadas para otorgar suavidad y dinamismo.
Además nos apoyamos mucho en el visual de ionic como base del diseño para centrarnos en la funcionalidad reutilizando lo máximo posible todos los componentes que nos dá la librería.
Como en todos los proyectos en los que colaboramos nos centramos desde el primer momento en el concepto de mínimo producto viable. Durante los dos primeros meses los requisitos fueron cambiando, pero fuimos ajustando ese mínimo producto viable mientras lo desarrollábamos.
Este tipo de proyectos requieren una toma de decisión rápida; si dudas, la oportunidad puede desvanecerse. Es mejor equivocarse rápido y probar mucho.
Para el desarrollo de la aplicación nos decantamos por un stack basado en microservicios con un stack Java/Firebase/Ionic. Esto nos daba la posibilidad de montar algo rápido y con orientación a una solución cross-platform. Queríamos mantener una buena experiencia en escritorio y en móviles teniendo presencia en los principales app stores.
